¡Bienvenidos!
¿Qué es un hábito y una rutina?
El psiquiatra y educador Rudolf Dreikurs mencionó
en uno de sus libros que “la rutina diaria es para los niños lo
que las paredes son para una casa, le da fronteras y dimensión a la vida.
Ningún niño se siente cómodo en una situación en la que no sabe qué esperar. La
rutina da una sensación de seguridad. La rutina establecida da un sentido de
orden del cual nace la libertad” … Y es que no le falta nada de
razón.
Es necesario establecer
límites a los niños pequeños para su desarrollo emocional, personal
(responsabilidad, seguridad…) pero también a nivel cerebral. Nuestro cerebro es
plástico y un aprendizaje a pequeñas dosis, pero continuas tiene un mayor
impacto que grandes dosis, pero puntuales.
¿Cómo podemos lograr introducir la rutina?
Cuanto antes empieces, ¡mejor! Si esperamos a que nuestros
pequeños tengan edad escolar para establecer su rutina nos será mucho más
difícil romper “los malos hábitos”.
1. Tú eres su modelo. No olvides nunca que una parte importante del aprendizaje de los humanos es por observación, por ello, si él vive embarcado en un clima familiar rutinario le será mucho más fácil establecer su propia rutina.
2. Cárgate de antídotos a posibles futuras complicaciones. Tómate un tiempo de reflexión y rellena la tabla que aparece abajo para cada situación que pudiera surgir. Recuerda que es siempre recomendable tener nuestro propio recetario para los momentos complicados del día.
3. El domingo, día perfecto para planificar su semana: Reserva un tiempo el domingo por la tarde para planificar su semana de manera CONJUNTA (a nuestro pequeño le gusta sentirse protagonista). Pero ¿cómo hacerlo? Utiliza una cartulina grande y coloca todas las actividades que tiene que hacer cada día:
TEN EN CUENTA:
Antes de
comenzar, explícale por
qué es necesario para él su rutina, de esta forma le dará un sentido y responsabilidad.
• Es
importante que sea regular.
Por ejemplo, actividades como los deberes o la sesión diaria de Smartick deben
ser a la misma hora todos los días.
• Horarios realistas y flexibles.
• Al final
del día revisad conjuntamente si
ha cumplido con su reto diario, si es así prémiale con 1 reto punto (podemos
sustituirlo por pegatinas). ¡Siempre
refuerzo positivo!
• Establecer conjuntamente cuál será su premio
semanal si consigue sus 5 reto puntos (por ejemplo, ir al cine, una
merienda especial, etc.).
• Reserva un hueco para sus actividades
divertidas ¡Es imprescindible!
• Coloca su
cartulina en un lugar visible. De
esta forma la podrá ver todos los días y saber qué actividades tiene que hacer
en cada momento.
• Cronómetro especial. Utiliza siempre el mismo cronómetro para marcar su tiempo. Es buena
idea que sea él quien lo elija y sólo éste se podrá utilizar para establecer
sus rutinas diarias.
• Utiliza
siempre frases del tipo “Primero
X… después Y…”
• ¡Últimos 5 minutos! Avisa a tu hijo cinco minutos antes del cambio de
actividad.
• Utiliza
la “Técnica de la tortuga” para
sus momentos de frustración. Porque no todo es de color de rosas, por ello,
ante momentos de pérdida de control (querer estar más tiempo en una actividad,
no querer hacer los deberes…etc.) debe tener sus propias armas para imponerse a
la situación. Con esta técnica se enseña a los niños a relajarse y a fomentar
su autocontrol.
• Consta de 4 pasos muy
sencillos:
• Celebra su reto semanal los viernes. Llega el recuento final, si ha conseguido todos
los puntos de la semana es el momento de premiarle por su gran labor y
responsabilidad.
• Introduce cambios de
vez en cuando. No todas las semanas deben ser iguales, es importante que haya algunos
pequeños cambios para no caer en la monotonía.
• Pero recuerda... Es un largo camino el que debes recorrer para crear los hábitos y rutinas en tu pequeño, vas a requerir una gran dosis de paciencia y trabajo en familia para que el resultado final sea exitoso.
Bibliografía
- Rutinas diarias. Mª Cruz Herrero García y Concepción Moreno Mora
- Guía de rutinas familiares. Rochelle Lentini y Lise Fox
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